PROGRAMA FORMACION VALENCIA 2013-14


Acompañar a un bebé que llega, a una mujer que se convierte en Madre,
a un hombre que se convierte en Padre,
 A la Familia que nace…

Es el privilegio mayor que alguien puede tener: 

SER TESTIGOS DE LA MAGIA DE LA VIDA
CON TODA SU INTENSIDAD

 Ese momento donde las máscaras caen, los corazones se abren, 
Las conciencias se elevan para que todo sea como debe ser.
Esta Formación es una oportunidad para conocerte más,
 Sanar tus heridas y 
Crecer para acompañar a otros 
En su viaje hacia la maternidad…

UNA VERDADERA REVOLUCIÓN INTERNA

Ya tenemos listo el programa del próximo curso, creciendo cada año en ganas e ilusión, estamos muy felices de compartirlo con vosotr@s

PRESENTACIÓN FORMACIÓN DOULAS NACER Y RENACER VALENCIA 2013-14

PróximoVIERNES 6 DE septiembre 18H
en LUZ INTERIOR  Calle Bailén,nº2-4.(Valencia)

una oportunidad de resolver dudas y conocer al equipo y parte de los ponentes.
Te esperamos!!! 

Confirma asistencia en naceryrenacer@hotmail.com

¿PREPARACIÓN AL PARTO? CLARO, PERO MEJOR .. PREPARACIÓN AL POSTPARTO!!

Llega ese momento tan deseado, soñado, esperado….
Y casi nada es como pensabas….
Todos, tenemos una idea preconcebida de como queremos vivir nuestra maternidad- paternidad, pero con frecuencia olvidamos que a quién atañe realmente esta experiencia es a ese bebé que llega y que, por tanto, toda las circunstancias van a ser creadas para que pueda tener su propia vivencia.

Cuando un nuevo ser llega a este mundo necesita que todo esté dispuesto, y no me refiero a canastillas, fulares, peluches, ni pañales.
Hablo de lo realmente importante: La relación con el entorno, la relación entre sus padres, con la familia..
Y es por ello, que ya en el embarazo suceden una serie de cambios con los que no contábamos. Todo se prepara: Se termina esa relación insana con quien creías tu amiga más íntima, mágicamente te echan de ese trabajo en el que ya no aguantabas más, o trasladan a tu pareja a otro lugar.
Sin que, aparentemente lo busques, surgen conversaciones con tus padres que nunca antes habían sucedido, descubres esos “secretos de familia” nunca sacados a la luz..
Sientes un deseo irrefrenable de cambio. Lo que antes servía ya no es posible mantenerlo..
Y, aunque hayáis respondido a esta llamada y  preparado “el nido” para acoger a vuestro bebé, tras el nacimiento aún continúan habiendo reajustes, pruebas, para asegurarse que todo está como debe estar.

Pero, si por el contrario, habéis desoído la llamada de este gran maestro que está llegando, tras el nacimiento, en ese momento crítico (Recuerda que proviene de la palabra CRISIS, es decir CAMBIO)  ya no puedes escapar y todo sucede abruptamente, dejándote al desnudo con tu realidad.
Porque, si realmente te entregas, la maternidad es la mayor oportunidad en la vida para conocerse de verdad, para sumergirte en tu sombra, reconocer quien eres y por fin empoderarte.
En esta etapa las medias tintas no sirven y sientes esa fuerza interna que va más allá de los límites que antes te marcabas. Ese empuje, esa fuerza de vida, hace que tengas esa determinación, esa claridad y esa fuerza que todo lo pueden.

Aunque somos las mujeres convertidas en madres quienes vivenciamos especialmente este proceso, también el resto de la familia se ve afectado: sobre todo el padre y los hermanos.

Durante el embarazo nos ocupamos de leer, de informarnos, de estar al día de los últimos artículos, métodos, etc.
Acudimos a clase de preparación al parto, aprendemos respiraciones, ejercicios, posturas.. cuando nuestro cuerpo que alberga la sabiduría de la madre cósmica, está conectado con la Gran Madre Tierra  y  tiene todo el Poder en su interior.
 Toda mujer lleva en sus células la memoria ancestral que la conecta con su esencia. Y eso sucede siempre que dejamos que naturaleza siga su curso y no intervenimos con interferencias externas.
Y entonces, tras el gran momento, cuando ya hemos traspasado la puerta, trascendido la gran iniciación, despertamos a una nueva realidad para la que casi nunca nos hemos preparado.
Cansados, felices, desconcertados, aún recién llegados del “planeta Parto”, tienes que poner límites, explicar, protegerte, enfadarte, llorar, huir..
..porque nadie alrededor parece comprender por que has cambiado, porque actúas así, pues “ellos sólo quieren ayudar y estar con el bebé”…
En ese momento en que sobran las palabras y esta díada mamá-bebé, esta nueva familia que acaba de nacer ,sólo necesita intimidad, sosiego, respeto, silencio y la única ayuda que necesita es tener una buena cantidad de comida casera en la nevera.. es entonces necesario que familia y amigos se mantengan en un segundo plano, realizando esa ayuda callada, discreta y permitiendo que el vínculo se cree en paz y armonía..

Por eso, cuando desoímos esa llamada y pretendemos “Seguir con nuestra vida normal”, como si nada hubiera cambiado, olvidando lo mágico y especial de este momento. Y sin embargo, atendemos visitas que no nos apetecen, nos obligamos a contestar todas las llamadas, responder a esas “obligaciones sociales”, alejándonos de ese regalo, de saborear la creación del vínculo con nuestro hijo.
Vamos en contra de lo que nuestro ser nos pide a gritos: Parar el mundo, bajarte de esa espiral de actividad frenética y TAN SÓLO ESTAR!
Tan sólo sentir la piel de nuestro bebé, saborear su olor, escuchar la melodía de su respiración, enamorarnos como nunca creíamos que podría suceder.
Es fundamental que protejamos la llegada del bebé, creando un mundo de sosiego y amor. Donde el único sonido sea el  canto amoroso de sus  padres, el único olor la dulce leche, el abrazo cálido y presente de su madre, que le recuerda que ella sigue ahí y que permanecerá disponible para él, dándole la bienvenida que necesita.
Dejar el tiempo necesario para conocerse, para adaptarse, para que la  díada bebé- mamá sea tan sólida que suavemente se convierta en triada, permitiendo al papá formar parte de ese maravilloso mundo.
Permitir que los hermanos se encuentren, se reconozcan, se huelan y se miren a los ojos susurrando palabras que sólo ellos conocen..

Y sin embargo, se nos olvida pedir lo que necesitamos verdaderamente, no hablamos de lo que queremos con nuestras familias y amigos…
Sólo, nos traicionamos una vez más, por agradar a los demás..
Pero ese ser que nos bendice con su presencia viene a mostrarnos que ya podemos ser libres, y honestos con nosotros mismos, podemos crear la realidad que queremos… aunque no sea lo que esperan los demás..

Por eso, os animo a reflexionar y a que creéis las circunstancias que os apetecen a vosotros sin pensar en lo que el entorno espera..
Anticiparse, activar la red, crear el entorno adecuado es la clave para disfrutar esta etapa fuera del tiempo y el espacio en el que sólo existen el amor, el éxtasis, la plenitud…Prepárate para abrir la puerta al caos, al descontrol, ámalo, fluye, vive sólo el instante presente, embriágate del perfume del amor auténtico, saboréalo todo, las risas y los llantos,  porque seguramente sea el momento más verdadero de tu vida.
El único en el que todo es como verdaderamente es.
Y este bebé viene a recordártelo.

Sonia Alonso.
Directora Formación Doulas  Madrid y Valencia.
Madre. Renacedora, terapeuta y doula.

EL NACIMIENTO DE ARIEL Y EL PARTO DE SONIA

EL NACIMIENTO DE ARIEL Y EL PARTO DE SONIA

Su ser se mostró enseguida, insistiendo en que su tiempo de para venir a la tierra ya llegaba y que nosotros éramos los padres que había elegido…Nos resistimos unos meses con los miedos típicos: es demasiado pronto, la situación económica no es la mejor, vamos a cambiar de ciudad..
Y a la vez, las ganas de recibir a Ariel crecían en nosotros cada día.. Durante muchas noches nos visitaba con su inmensa luz dorada y su energía amorosa..
Encuentros que jamás olvidaré.. y que ahora con su mirada profunda me recuerda cada momento..
Por fin, paramos la mente, dejamos los miedos a un lado, nos abrimos y ese mismo mes Ariel fue concebido en un mar de amor y entrega .. no lo hubiera soñado mejor…Se mostró, le sentimos, y la vida empezó a latir en mi bendito útero..
Después semanas intensas, días de Sanación con momentos de todo tipo, de limpieza, de crisis, de alegrías, de atrevimiento, de miedos…
Y por fin, diez lunas de crecimiento después, Ariel volvió a llamar a la puerta, otro gran momento estaba a punto de suceder…
Y llegó la gran noche:
Buscó el día que necesitaba donde todas las circunstancias eran las adecuadas para su camino.. Una noche, en la que Miguel estaba trabajando y su hermano Iván en casa de un amigo..
Y yo, disfrutando mi soledad, bailando las canciones que me conectaban a él, observando mi cuerpo, los cambios en mí..En seguida sentí que esa iba a ser la gran noche, pero no sabía que algo distinta a como la había proyectado en mi mente!!
Las contracciones aumentaban de frecuencia y avisé a su padre: “parece que hoy puede ser” (tras muchas noches esperando y creyendo que podía ser, no me atrevía a ser tajante)
Y en un par de horas, la bolsa se rompió bañándome de líquido calentito y claro. Ahora si!! Por fin!!!
Llamé a Miguel, que sin pensarlo avisó a nuestros compañeros de viaje, a María y Juanjo, las matronas, y a Ile, hermanita-doula.
Aún quedaba mucho, así que, sabiamente, ellos, descansaron mientras las contracciones aumentaban y nosotros saboreábamos la cercana llegada de nuestro deseado bebé.
Disfruté estas horas, en mi mundo, conectando con él, sintiendo la música, el espacio como había deseado.. y olvidando mi promesa cuando nació mi Hijo Iván, hace casi 16 años, de descansar lo más posible en la dilatación.. pero quién se echa a dormir con tanta emoción!!!
Todo discurrió con normalidad, los angelitos-comadronas actuaron conforme a nuestra petición, sin intervenir, acompañando en la discreción..
Las horas pasaban muy rápido y al amanecer, cuando la intensidad aumentaba empezaron a aparecer los personajes de la historia:
Apareció Doña impaciencia quien no tomó muy bien saber que estaba de 5 ctms, a pesar que Mrs. Expectativas le había asegurados semanas antes que iba a ser un parto corto, en 2 o 3 horitas, todo resuelto..
Y Sonita, mi hermana pequeña en holograma, no lo podía creer: Eso es imposible, jo.. ya estoy muy cansada, han pasado muchas horas.. y Juanjo, le rescató diciendo: “El cuello del útero está muy posterior, vamos a traerlo hacia adelante.. Ahora has ganado 2 cts.”
Y la pequeña Sonita se conformó, eso era otra cosa,7 cms estaba mejor..
Pero según transcurría el principio de la mañana vino de visita el Sr. No puedo, tan gruñón como siempre, pero la hermanita Sayencita le invitó a salir a dar un paseo, “claro que puedes…”
También me visitó un familiar cercano de la Srta. Póngame la Epidural!!, se llamaba: “Y si me tomo un poco de árnica?”.. a la que nuestra hermana doula, le hizo una verónica con la vieja táctica “ perdone, no le escucho bien!” asegurándose de que me sintiera acompañada con un correcto: “¿Tu quieres?” Que con la siguiente contracción pasó al lago del olvido..
Y así, paseo va, paseo viene, haciendo turismo por el baño, comprobando las baldosas del pasillo.. me encontraba con aquel robusto roble llamado María donde me colgaba sin miramientos segura de su fuerza.. pobre roble.. y me abrazaba a mi compañero Miguel haciendo equipo, compartiendo la emoción, sintiendo su cuidado y su preocupación.. “Esto es normal? Va todo bien?..”Como saber que sucede dentro de alguien que está y no está, que grita y ríe casi a la vez..
En varias ocasiones apareció el guardián de la puerta recordándome la necesidad de dejarlo todo para atravesarla.. de entrar vacía, sin peso, sola, sola con mi fuerza.. con mi luz y con mi sombra..
En una de esas puertas, clavada en el pasillo, escuchaba de fondo: “Camina así como un pato, con los pies hacia dentro!” No podía moverme, toda mi atención estaba en conseguir relajar mi mandíbula que se había convertido en acer o.. sabía que ahí se encontraba la llave de la siguiente puerta.. a la vez que relajaba mi mandíbula, obediente comencé a caminar como me decían..
Era imposible distinguir a mis pacientes acompañantes. Sin duda hacía tiempo que se habían fundido en una sola fuerza, en un canal a través del cual cuatro ángeles del cielo descendieron para ayudarme, ofreciéndome lo que necesitaba en cada momento, una palabra de ánimo, un espacio de soledad, una mano en el sacro (Benditas manos en el sacro!!!), un toque sanador, un brazo donde apoyarme…
Con cada intensa contracción sentía a Ariel más cerca, le pedía que saliera, le llamaba.. Imagino, que él hacía lo mismo.. y el equipo funcionó..
Por fin, podía tocar su cabeza con mi mano.. y eso me daba la fuerza para la siguiente contracción..
Pero aún quedaba la gran puerta, en la que mueres para vivir y vives para renacer…
Llegado a ese momento en el que sentía mi cuerpo rompiéndose, y aparecía ese miedo a morir, a romperte por dentro y por fuera… Salió mi poder.. y decidí: Si tengo que morir moriré, si mi cuerpo ha de romperse que lo haga, pero este niño va a nacer para vivir!!
Me incorporé, recuperé la fuerza, no había lugar para más personajes, ahora Sólo Ariel y yo éramos los protagonistas, un último empujón y su preciosa cabeza salió, una pausa, palabras de ánimo, silencio dentro, un par de contracciones y Todo su cuerpo estaba fuera, precioso, rosado, lleno de vida..
Imposible expresar con palabras esa emoción, esa experiencia divina que es tocarle, olerle, su presencia, su mirada…

Y así nació Ariel, con fuerza y seguridad, con claridad de que quiere y que no, cuando y como…. Y así sigue, acompañándonos y llenando nuestros días de alegría de esa que perdura en el corazón..

A los cinco minutos, Ariel estaba mamando, mostrando sus ganas de estar en la Tierra y su fuerza.
Después la placenta, fácil, rápido, suave.. Cuanto sanado!!!!
El cordón nunca fue cortado, Ariel y la placenta permanecieron unidos hasta que el estuvo preparado para el siguiente paso. Ariel tuvo un nacimiento loto. Tras seis días de paciencia, integración, veneración, y mucha maña.. el cordón se soltó de su lindo ombligo, y ocurrió su segundo nacimiento. En esta ocasión un nacimiento al mundo exterior, a conocer a los demás familiares y amigos, el parque…

Sentí que para mí también era un nuevo nacimiento y que había llegado el momento de abrir poco a poco esa ventana que había permanecido cerrada, Estábamos preparados para el mundo porque habíamos creado un núcleo sólido cimentado con amor y cuidado, con tiempo y caricias, un núcleo que es esta nueva familia que ha nacido junto a Ariel..

Gracias…gracias Ariel por venir, por elegirnos para acompañarte en tu camino, por tocarnos con tu luz, gracias Universo por este gran regalo, gracias cuerpo, bendito útero..gracias Miguel por permanecer y dejar que el tiempo colocara todo en su lugar, gracias por tu amor…..gracias Iván, por tanto compartido, por tu luz y tu apoyo, por permitir el regalo de verte crecer y convertirte en el hombre que eres, ésta nueva maternidad nos acerca más aún más si cabe..gracias Ile, hermana, tanto compartido, tanta complicidad en nuestro crecimiento, tanto disfrutado, y ahora, sentir tu apoyo, tu respeto me ha recordado mi fuerza en esos momentos de debilidad.. Gracias décima luna por acompañarnos en esta aventura…gracias a todos los seres visibles e invisibles que nos habéis ayudado.. gracias Kwan Yin, gracias Lady Nada, gracias Inanna…

¿Quién es una Doula?

"Doula" es la persona que acompaña, apoya y contiene a una mujer en el embarazo, parto y postparto, recordándole su fuerza y sabiduría interior en el viaje hacia la maternidad.
El término proviene del vocablo griego que significa esclava o sirviente, y designaba a la persona que ayudaba a la mujer principal de la casa durante su proceso de parto y postparto. Tradicionalmente, los conocimientos sobre el embarazo, parto y puerperio, se transmitían de madres a hijas, o entre mujeres de la misma familia, del mismo clan, de la misma aldea.
Las niñas crecían impregnándose de la vida, siendo testigos de nacimientos, aprendiendo los primeros cuidados que precisa el recién nacido. Con los años iban comprendiendo que el parto es un proceso más de la vida sexual de la mujer, es algo natural para el que no es necesario “prepararse”, tan sólo hay que abandonarse y conectar con nuestro poder como siempre hemos hecho. Existía la figura de la Comadre.
Debido a las circunstancias laborales y la forma de vida en la sociedad actual, las redes de apoyo entre mujeres prácticamente han desaparecido.
A demás, el concepto de familia nuclear hace que sea la pareja en soledad la que tenga que afrontar la maternidad, sin apoyo del clan.
La mujer comienza este viaje sin referentes claros, cercanos, de otras mujeres. Muchas no han estado presentes en un nacimiento, ni han visto amamantar.
El modelo que conocen, les llega a través de revistas especializadas, libros…que a menudo muestran una imagen idílica y poco realista de la maternidad, lo que les hace caer un estado de falta de confianza, soledad y frustración por no cumplir ese estereotipo.

De pronto, la madre siente que no está viviendo la experiencia maravillosa y féliz que esperaba. Cuando tiene el privilegio de encontrarse con otras mujeres en su misma situación, descubre que esos sentimientos de temor, soledad, de desconfianza, de ira y frustración por las prácticas a las que se ven sometidas, a veces pudiendo ser evitadas, como la separación de su bebé nada más nacer, las cesáreas innecesarias y muchas otras tan habituales hoy en día.

Por ello, la primera misión de la Doula es informar en clave positiva y abierta de lo que supone la experiencia de la maternidad y del nacimiento a las mujeres embarazadas, a la pareja, a la familia. Explicando con naturalidad que ese cóctel de emociones y miedos que sienten es normal, pero que si confían en su poder, y reafirman el vínculo de la pareja todo va a ir encajándose en el momento clave porque la fuerza de la vida está por encima de todo.
Los acompañamientos se realizan donde la mujer lo necesite, en casa, en el hospital, en la casa de partos. La Doula está presente, respetando e informando, conteniendo desde la más amorosa paciencia. Refuerza la unión de la triada, para que el hombre ocupe su lugar sin sentirse desplazado o inútil. Contiene sin ser vista, atenta, actuando cuando es necesario para evitar una intervención excesiva.
A lo largo del embarazo las necesidades de la mujer van cambiando, y la Doula tiene los conocimientos para apoyarla en las diferentes etapas, resolviendo sus dudas y adaptándose a sus tiempos y prioridades.
Así, durante el embarazo aporta información y sugiere ideas sencillas para facilitar a la mujer todo el proceso. Le ayuda a realizar su plan de parto. Afronta junto a ella las cuestiones necesarias para anticiparse y evitar dificultades en el nacimiento.
Acompaña a la futura madre en su crecimiento personal para recibir al nuevo ser.
En el parto, está presente, respetando su espacio, su silencio, atenta a todo para que la mujer tenga el máximo confort y evitando las influencias externas que podrían bloquear el proceso normal y parar la secreción de las hormonas necesarias en el parto.
Apoya y tranquiliza a la familia, colabora con el equipo médico que esté presente, y se convierte en la guardiana personal del bienestar de la madre y su bebé a punto de nacer.

Tras el nacimiento, ayuda a reforzar el vínculo materno y a asentar la triada que acaba de crearse. Resuelve las dudas y proporciona las pautas necesarias para que la lactancia sea fácil, y que la madre no se sienta desbordada ante la nueva situación.
Gracias a la presencia continuada de una Doula, la mujer se siente acompañada en su viaje a la maternidad, se siente segura y empoderada, se refuerzan los lazos familiares, se reafirma el vínculo y puede así disfrutar en plenitud de esta etapa tan especial de la vida.
Existen numerosos estudios que demuestran que la presencia de una Doula evita muchas de las posibles complicaciones en el nacimiento y primeros días de vida del bebé. Se reduce el número de cesáreas, el parto es más corto, menos oxitócina sintética, menos epidural, mejor lactancia, etc. Es importante que el parto se desarrolle en un ambiente de seguridad y confianza para que el cuerpo de la mujer pueda segregar las hormonas. Es necesario conocer algunas situaciones que actualmente son habituales y pueden bloquear el proceso del parto.
Cualquier activación del neocortex detiene la secreción de hormonas como la oxitócica, necesaria para la normal dilatación, la disminución del dolor y la creación del vínculo afectivo, entre otras cosas. Si hacemos repetidas preguntas a la mujer en este momento, si no respetamos su intimidad, activamos sus miedos, la exponemos a una luz intensa y a demás le alejamos de sus seres queridos en un momento tan delicado, es un milagro que esa mujer pueda parir.
La información puede evitar muchas de esas situaciones. Podemos mejorar la forma en que se llevan a cabo los nacimientos, evitando que esos niños carguen con una mochila tan pesada desde tan temprano.
Para acompañar a mujeres y a familias en esta etapa, es imprescindible disponer de herramientas para poder gestionar nuestras emociones y contener al entorno.
Por ello, es tan necesario que una Doula haya realizado cierto trabajo personal y haya sanado su propio nacimiento pues lo revivirá en cada parto que acompaña.
De igual manera, cada mujer en el momento de parir activa los patrones generados en su nacimiento. Es lógico, por tanto, pensar que cuanto más liberación e integración hayamos realizado de nuestro propio proceso, más sencillo será el momento del alumbramiento.
En estos tiempos en los que es tan necesario recuperar los valores olvidados, imprescindibles para el bienestar de esta sociedad, tenemos una gran oportunidad porque si cambiamos la forma de nacer cambiamos el mundo.
Sabemos que la experiencia que el nuevo ser tiene en su llegada a este mundo, genera una especie de mapa psicológico donde quedan cristalizados los miedos, el dolor, la separación, el rechazo, etc. de forma que a lo largo de la vida repetimos esos patrones y atraemos una realidad basada en pensamientos limitadores que nos impiden tener una vida plena y libre de condicionamientos.
A través de técnicas como el Masaje Metamórfico y la Respiración consciente, Rebirthing, podemos liberarnos de esos patrones y recuperar nuestro poder para ser más felices. Los condicionamientos que se crean desde la concepción hasta después del nacimiento se pueden liberar, llegando a un conocimiento más profundo de uno mismo. Es posible cambiar los códigos de nuestra mente y nuestra memoria celular.
De todo esto surge la necesidad de crear una formación específica como esta, donde preparar a personas para esta labor. Se trata de un viaje interno de nueve seminarios, nueve meses para profundizar en nuestro inconsciente y liberar los viejos patrones. Una oportunidad para conocerte, integrar las experiencias vividas y adquirir la destreza y las herramientas necesarias para ayudar a otros.
Para crecer como individuos y para desarrollarnos como sociedad es necesario tomar conciencia y cambiar la forma de nacer para crear un mundo más humanizado y consciente.

RECOMENDACIONES DE LA OMS SOBRE EL PARTO

RECOMENDACIONES DE LA OMS SOBRE EL PARTO

1. Toda la comunidad debe ser informada sobre los diversos procedimientos que constituyen la atención del parto, a fin de que cada mujer pueda elegir el tipo de atención que prefiera.

2. Debe fomentarse la capacitación de obstétricas o parteras profesionales. Esta profesión debiera encargarse de la atención durante los embarazos y partos normales, así como del puerperio.

3. Debe darse a conocer entre el público atendido en los hospitales información sobre las prácticas de los mismos en materia de partos (porcentajes de cesáreas, etc.).

4. No existe justificación en ninguna región geográfica para que más de un 10 al 15% de los nacimientos sean por cesárea.

5. No existen pruebas de que se requiera cesárea después de una cesárea anterior. Por lo general deben favorecerse los partos vaginales después de cesáreas.

6. No existen pruebas de que el monitoreo durante el trabajo de parto normal tenga efectos positivos en el resultado del embarazo.

7. No está indicado el afeitado de la región púbica ni los enemas preparto.

8. Las embarazadas no deben ser colocadas en posición de litotomía (acostadas boca arriba). Se las debe animar a caminar durante el trabajo de parto y cada mujer debe decidir libremente la posición que quiera asumir durante el parto.

9. No se justifica el uso rutinario de la episiotomía (incisión para ampliar la abertura vaginal).

10. No deben inducirse (iniciarse por métodos artificiales) los partos por conveniencia. La inducción del parto debe limitarse a determinadas indicaciones médicas. Ninguna región geográfica debe tener un índice de trabajos de parto inducidos mayor al 10%.

11. Debe evitarse durante el parto la administración por rutina de fármacos analgésicos o anestésicos que no se requieran específicamente para corregir o evitar una complicación en el parto.

12. No se justifica científicamente la ruptura artificial de membranas por rutina.

13. El bebé sano debe permanecer con la madre cuando así lo permita el estado de ambos. Ningún procedimiento de observación del recién nacido justifica su separación.

14. Debe fomentarse el inicio inmediato del amamantamiento, inclusive antes de que la madre salga de la sala de partos.

15. Deben identificarse las unidades de atención obstétrica que no aceptan ciegamente toda tecnología y que respetan los aspectos emocionales, psicológicos y sociales del nacimiento.

16. Los gobiernos deben considerar la elaboración de normas que permitan el uso de nuevas tecnologías de parto sólo después de una evaluación adecuada.